El vice presidente regional, César Aliaga Díaz, lamentó las declaraciones del ministro de Energía y Minas, Jorge Merino Tafur, quien en un encuentro con la prensa insistió en la viabilidad del proyecto minero Conga, a cargo de la transnacional Newmont.
A su salida de un conversatorio sobre prevención de conflictos, organizado por la Mesa de Concertación para la Lucha Contra la Pobreza y el Comité Ejecutivo Regional Cajamarca, Aliaga Díaz dijo que la actitud del señor Merino es prepotente y provocadora ya que hasta el momento ni el gobierno central ni la empresa minera han generado condiciones que sugiera acercamiento y diálogo con la población que rechaza la explotación cuprífera.
La autoridad regional recordó que en su oportunidad el presidente de la república, Ollanta Humala, había prometido establecer nuevas reglas para la minería; sin embargo hasta el momento no ha dado muestras sustanciales para ello, mas por el contrario, dijo que las normas dictadas últimamente están encaminadas a favorecer a los intereses de las empresas y no garantiza el derecho de las comunidades.
Aclaró que hay desazón en las comunidades que se oponen al proyecto ya que hasta ahora no han tenido la oportunidad de ser escuchadas por ninguna autoridad de carácter nacional; en cambio a las autoridades que están a favor se les da todas las facilidades para conversar con un ministro, lo que significa señales contradictorias al diálogo.
Por otro lado dijo que la empresa minera jamás dio señales de canalizar las exigencias de la población. Agregó que ni siquiera ha querido allanarse a las recomendaciones de los peritos que contrataron y no han modificado en absoluto el Estudio de Impacto Ambiental, ampliamente cuestionado por sus debilidades técnicas, sociales y ambientales. “Opinar que las condiciones están dadas para impulsar el proyecto Conga es minimizar el rechazo de los cajamarquinos y atizar más el conflicto”, dijo.
Finalizó diciendo que Cajamarca ha expresado una decisión y lo va a ratificar; el sentimiento por la defensa del agua es muy fuerte, las comunidades a las que la empresa y el gobierno ignoran terminarán recordándoles que también son de este país y merecen respeto.
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