“Observamos que no hay mejoras sustanciales en la economía del país”, aseguró el gobernador regional de Cajamarca, Porfirio Medina Vásquez, durante su disertación en la audiencia pública regional, desarrolla en Bambamarca, el 24 de agosto de 2017, al realizar un análisis de la situación actual de nuestra Patria.
La máxima autoridad comentó que “el fenómeno del niño costero, la corrupción institucionalizada, cuya expresión más alta es Odebrecht, y un mal manejo de la política económica y de los conflictos sociales, muestran al actual gobierno nacional débil y sin rumbo, lo que generan impactos negativos en el crecimiento económico, condición necesaria para mejorar la calidad de vida de la población”.
Medina Vásquez analizó las cifras económicas actuales de nuestro país. “Al primer semestre de este año la economía creció tan solo 2.5%. El Banco Central de Reserva del Perú estima que a finales de este año llegaremos a un crecimiento de 2.8%”.
El gobernador regional fue enfático al asegurar que “los únicos motores que impulsan la economía son el aumento gradual de nuestras exportaciones y un crecimiento favorable del consumo interno; es decir, el consumo del pueblo; sin embargo, se espera que la inversión pública logre crecer un 7% a fines de este año, y que la inversión privada no siga cayendo, ya que en los últimos 3 años tuvo indicadores negativos”.
“Los esfuerzos del Gobierno Nacional están pensados para el corto plazo, es decir solo en el crecimiento económico y no para mejorar la productividad, menos para diversificación productiva, así como impulsar la industria, potenciando los sectores agropecuario, turístico, agroindustrial, manufacturero, entre otros; que permitan acumulación y redistribución de la riqueza, con sostenibilidad y cuidado ambiental”, comentó Porfirio Medina.
RECURSOS
CENTRALIZADOS
También precisó que “hay una serie de demandas de diferentes sectores a nivel nacional y altos costos que atender en la reconstrucción por los daños ocasionados por el fenómeno de El Niño costero, sin embargo, los recursos que llegan a las regiones, en particular a Cajamarca, son insuficientes. Aún el gobierno central concentra gran parte de los recursos presupuestales dejando de lado a los gobiernos subnacionales”.
“Al 2017, el 40% del presupuesto de inversiones lo administra el gobierno central, otro 40% es manejado por los gobiernos locales y solo el 20% por los gobiernos regionales. Nuestro gobierno es uno de los más afectados ante los recortes presupuestales. A agosto de 2017 disponemos de 384 millones de soles para obras, lo que representa que el gobierno regional tiene un presupuesto de 251 soles por persona, para una población de más de un millón 500 mil habitantes”, indicó el gobernador regional.
Luego hizo una comparación con otras regiones, señalando que “si vemos a Moquegua -con una población de 182 mil habitantes- recibe mil 641 soles por persona, le sigue Madre Dios con 895 soles por persona, Arequipa 687 soles por persona...; siendo Cajamarca una de las regiones menos favorecidas presupuestalmente, a pesar de tener grandes necesidades y contribuido durante años con el erario nacional”.
“El Gobierno Regional Cajamarca en los últimos 5 años administró sólo el 13% del presupuesto de inversiones que llega a nuestro departamento; es decir, de cada 100 soles que se transfiere, corresponde 13 soles a la gestión regional, y 87 soles lo administran los gobiernos locales y el gobierno central”, puntualizó la autoridad regional.
TRANSNACIONALES
FAVORECIDAS
“El Ministerio de Economía y Finanzas nos dice que no hay suficientes recursos para distribuir a las regiones, porque la recaudación tributaria habría caído en los últimos años; sin embargo, se dan enormes exoneraciones y devoluciones tributarias a grandes empresas del sector minero y otras”, comenta Porfirio Medina.
Luego precisa que “según la Sunat, entre 2013 y 2016, las empresas mineras pagaron, por impuestos a la renta e IGV, 10 mil 700 millones de soles, no obstante el Estado les benefició con la devolución de 13 mil 500 millones de soles (IGV); es decir, no pagaron ni un sol durante este periodo, más bien el Estado le estaría adeudando más de 2 mil 700 millones de soles”.
Finalmente refiere que “mientras un millón y medio de cajamarquinos se queman el lomo de sol a sol produciendo y pagando sus impuestos, las multinacionales tienen enormes beneficios y exoneraciones del Estado; por lo que con lo dejado de percibir se perdió la gran oportunidad de mejorar la educación, la salud, el saneamiento, la actividad agropecuaria, entre otros”.
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